Un día os enseñé a pasar por un duelo. Sus fases, qué hacer, como pasar por cada una sin quedarse bloqueado en ninguna.
Me alegro de haberme encontrado a mi misma de nuevo. Después de tanta tristeza, de tantos hombres que me hicieron daño, de no ser nadie, de no existir y ver como constantemente cualquier otra era la elegida...
He escuchado de todo, pero siempre lo mismo... "sólo tú me conoces", "me conoces mejor que yo mismo", "solo contigo puedo ser yo"... Soy la tía serena que escucha los problemas, da consejos y sirve de chica de paso. Nunca ninguno se paró a pensar si eso era lo que yo quería o necesitaba... ninguno se paró a decirme "cuéntame tus problemas, esta vez soy yo el fuerte, el sereno, el que escucha y aconseja. Esta vez importas tú más que yo y mi mierda"... La mayoría eran unos mierdas, niños grandes, inmaduros, egoístas a los que tenía que tratar con condescendencia y armarme a veces de paciencia para soportar cada minuto con ellos. Tengo un imán para los hombres que buscan una madre en vez de una novia.
Pero os hablaba de lo del duelo... el sistema que os expliqué para salir de la puta desesperanza en la que te metes cuando pasas por todas sus fases.
Y aquí estoy con mi dilema... no puedo pasar un duelo ahora, me niego, no me lo merezco. A veces ocurre y ¿entonces qué haces?. Usar la parte racional. Llorar y seguir.
Fácil decirlo... difícil hacerlo, como siempre.
Inventa una historia. Ese es el truco. Analiza a la persona y crea una historia buena o mala, pero creíble. Si es mala podrás eliminar a esa persona de tu vida, si es buena... tú verás qué haces.
Sabéis que suelo quedarme con una idea y si tengo dudas busco la verdad. Al principio, si creía lo que me decía no podía inventar una mala historia, me parecía una persona buena, pero herida.
Ahora tengo claro que me mintió desde el principio. Que es un mentiroso compulsivo. De estas personas que usan la mentira como escudo constante para quedar bien.
Quizás soy dura, pero es la verdad y lo que él demuestra. Las mujeres que le rodean realmente no importan y puede que hasta sea normal que se acaben volviendo locas a su lado, porque seguro que les llega un momento en el que no saben ni qué creer.
No necesito inventar una historia mala. Es sencillo, cada palabra que le he escuchado decir es mentira "no quiero conocer a otras" (y estaba conociendo a otra sin decírmelo), "para qué voy a buscar fuera si lo tengo todo contigo" (y estaba buscando fuera). "No follamos, hacemos el amor" (sin comentarios...)
Sabe qué decir para dejar contenta a la persona que tiene al lado. Es un Elfo más.
Tenéis que coger lo bueno pero también lo real, aunque duela. Mi realidad, porque tengo que aferrarme a una realidad que sea palpable para mí y que me ayude. Para cada uno hay una realidad distinta. La mía, mi mayor temor... no existir. Y me ha demostrado con creces que yo era una tía a la que tirarse que no valía nada para él y de la que se ha aprovechado para pasar el verano con mentiras absurdas, así que, aunque jodida... la realidad está ahí y no se puede mover.
No se puede coger lo que diga el corazón. A veces el corazón está loco. ¡Joder, el mío lo ha estado estas semanas!. Toda una vida diciéndole a todo el mundo y argumentando con lógica que los flechazos no existen, que te enamoras de la gente poco a poco y con el tiempo y ¿Yo he sentido uno ahora? No tiene razón de ser, no es lógico. En realidad creo que lo que me ha pasado es que quería creerle, necesitaba que las palabras y los momentos fueran ciertos, pero al final, da igual con quién. No es de él de quien me he enamorado, es de un fantasma que ni siquiera existía.
Así que coged eso, tres líneas, y montad una historia que os proteja un poco, basada en cosas lógicas y ciertas para vosotros, no os aferréis a sensaciones, a intuiciones o a palabras bonitas.
Que no existía lo voy a convertir en un hecho. Me peleé todo el tiempo con esa sensación. Quiero pensar que todo lo que pasaba, todo lo que me dijo, toda esa magia que yo sentía, habría pasado con cualquier otra que se cruzara en su camino. Él necesitaba una muleta y yo tenía que haber huído, era lo coherente, lo que hago siempre que me encuentro en una situación así, en la que yo jamás voy a existir, pero fui gilipollas y no lo hice.
¿Yo lo habría hecho diferente? Claro, porque yo soy yo. Soy una necia a veces, valiente con mis sentimientos porque sé que puedo enfrentarme a los fracasos y vencerlos todos. Me arriesgo porque sé levantarme, pero no puedo pedirle a los demás que hagan eso, es completamente ridículo e injusto. Y la gente como él no lo hace diferente, les da igual que sufras además.
He estado dándole vueltas a lo de los momentos. "No es mi momento" decía. Y me he dado cuenta de que es un cuento chino. Nunca será su momento para nada, porque no va a tener el valor de olvidarse de mujeres, estar verdaderamente solo y entenderse a sí mismo para poder llegar a ser un hombre noble. No puedes controlar lo que aparece en tu vida y cuándo aparece, el momento adecuado no existe, la vida hay que aceptarla tal y como viene, cuando viene.
Me digo a mi misma que lo hacen cuando algo no importa mucho y si no se suben a mi tren es porque yo no importaba en absoluto, pero lo cierto es que lo hacen sin más y a veces se equivocarán pero creo que sólo he conocido a un hombre capaz de rectificar en algo así. Éste no lo hará y yo lo agradezco, con sus palabras vacías va a hacer mucho daño a su alrededor y yo no pienso ser una de sus víctimas.
Óscar lo decía el otro día, "no conozco a nadie de nuestra generación que no busque una madre-controladora en su pareja, con lo bonito que sería ser cómplices simplemente". Me encanta esa palabra, "cómplices". Y creo que Óscar tiene razón. Pero no se puede ser complice de alguien que se esconde detrás de capas de teatralidad, de mentiras para quedar bien y ni lo reconoce. Para él, en su cabeza, es la víctima de las relaciones que ha tenido, pero lo cierto es que éstas personas no se dan cuenta de que "lo que han tenido" lo han provocado ellos mismos con sus mentiras y poca madurez emocional.
En mi mundo solo encajaría alguien que no necesite estar conmigo, que no necesite que yo le necesite para sentirse útil. Alguien que esté porque libremente decida estar, sin necesitarme, sabiendo que siempre, cada minuto con él para mi será útil porque sí, porque es él, porque yo le quiero y no le necesito. Quizás ese alguien esté por ahí escondido o quizás no exista.
Mira que os he hablado de hombres perdidos, de mi propia perdición, aunque incluso ahí encontraba momentos para levantarme e ilusionarme. Pero sólo ha habido un hombre no perdido en mi vida y en ella sigue, porque es el único que merece la pena.
El día 16 escribí un post de como me sentía con él, como en una jaula en la que yo misma había entrado voluntariamente, en realidad era mi miedo a los viajes y él me había propuesto ir a Navacerrada un par de días. Entonces escuché esta canción de Pink:
Y pensé "lánzate a la piscina", la jaula la estás creando tú sola, quizá esta persona tan bonita sea capaz de encontrar las llaves de tu ático.
Ahora no tiene mucho sentido, viendo lo que he visto, está claro que las llaves de mi ático las encontraré yo algún día y seré yo, completamente sola, la que me enfrente a todo lo que tengo ahí arriba. De verdad creo que acabaré mis días completamente sola y no me asusta. Prefiero estar sola que con hombres así.
Definitivamente me quedo con ese momento y ese mensaje de "no te rindas" que me envié a mi misma.
Las canciones que representaban otras personas nunca fueron esperanzadoras y ésta lo era y eso se lo debo a esa bonita persona que yo creía que era él por dentro y a la "locura suicida" que he recuperado y me hace sentirme tan viva.
Quizás debería dedicar este de post a las buenas personas que necesitan salir de su propio infierno, para que no den con gente egoísta que los manipule con palabras vacías. Pero me lo dedicaré a mi misma como agradecimiento por el café, las risas, las cenas, los abrazos, las caricias, las charlas y sobre todo, el primer beso cada día en la puerta de su casa y me lo dedicaré a mí, por haberle dado todo eso sabiendo que arriesgaba mi corazón en el intento y que yo fui completamente fiel a lo que decía, sin saltarme ni una coma, poniendo la verdad por delante, independientemente de lo que al final he visto que tenía delante de mí.
En fin, yo también merezco algo bonito por una vez, mucho más de lo que he recibido hasta ahora en mi vida, merezco sobre todo, sinceridad y valentía. Merezco un "eres importante", un "estoy dispuesto a andar este camino contigo si nos damos la mano cuando tengamos miedo", un "te elijo a ti en el puto momento que sea", pero que sean de verdad, no farsas.
Si ese día llega con alguien de verdad, alguien que me vea, me valore, me admire y me quiera tal y como soy, alguien que me eche de menos, que sea fiel y leal, que piense en mi por la noche, que sepa decirme "confía en mi, porque estoy aquí", que sepa decirme "tengo este dilema, arreglémoslo juntos", alguien que me diga de verdad y de corazón "para que voy a buscar fuera si con mi Veroniquilla lo tengo todo", si ese día llega, lo arriesgaré todo sin dudarlo y le daré a esa persona lo único que tengo, sinceridad, lealtad y confianza siempre. Esa puerta sí la tengo abierta de par en par, porque alguien habrá en el mundo que sea capaz de acompañar sus palabras de hechos para que no estén vacías. Si ese día llega, hasta seré capaz de perdonarle cualquier cagada absurda porque será mi humano imperfecto, que es lo que siempre he querido tener a mi lado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario